Las profecías mayas del Fin de Ciclo no hablan de
catástrofes sino de cambios de paradigmas, de estructuras y de mentalidad,
como parte de la evolución humana. El año en que sucedería este salto cuántico
empieza el próximo 26 de julio.
A los Mayas se los llama “los maestros del tiempo”, ya que
se han descubierto 19 tipos diferentes de calendarios con los que sincronizaban
sus vidas, en pequeña y gran escala.
Uno de estos calendarios, la "Cuenta Larga",
parecía indicar EL FINAL DE LOS TIEMPOS para el 21 de diciembre del 2012.
Hoy se interpreta esa fecha como un cambio de ciclo en
el devenir de la humanidad, pero ya no como el fin del mundo.. tal vez sí de
las estructuras que hoy lo dominan.
Otro de estos calendarios, el de Trece Lunas de veinte días cada
una, organiza nuestros ritmos naturales y los sincroniza con nuestra
galaxia.
Justamente, el 26 de julio comienza el año llamado "Tormenta
Resonante Azul” de este almanaque tan especial.
“El sello Tormenta nos habla sobre el cambio,
la metamorfosis, la transformación. La tormenta antecede la calma, la cual a su
vez antecedió a la tormenta o quizás a una simple lluvia. La vida en general y
cada día en particular son ciclos que parecen repetirse, pero en realidad son
espirales ascendentes, siempre estamos evolucionando”.
“El tono Uuk (Resonante Azul) nos habla sobre el
equilibrio, es el punto medio en el Sistema de Sanación de las 13 Lunas Mayas.
El desafío para este nuevo año es transformar nuestro
interior y nuestro exterior en búsqueda del equilibrio, sin
perder de vista que la vida está hecha de momentos para desarrollar nuestro
Núcleo de Amor junto a aquellas personas que elegimos para que sean parte de
nuestra vida.
Con respecto a la fecha del Año Nuevo Maya,
existe alguna confusión,por eso es válido aclarar lo siguiente:
Los Mayas llevaban dos calendarios principales:
• El Tzolkin o Calendario 13:20, que era el
calendario ritual y el más importante.
• El Haab, de 18 meses con 20 días cada uno, y con 5
días al final del último mes.
Al parecer de estos cinco días se extrapola el concepto del Día
Fuera del Tiempo.
El historiador José Argüelles propone el uso del
calendario de Trece Lunas de 28 días como el instrumento para armonizar a los
seres humanos con el cosmos.
Se basa en la idea de que los Mayas llevaban un Calendario
Lunar llamado Tun Uc de 13 meses con 28 días cada uno, lo que
da un total de 364 en el año y otorga un día extra para completar el ciclo
solar, entendido como un día de meditación ante el nuevo año. También
se concibe esta fecha como un portal dimensional.
El Calendario de las Trece Lunas o Dreamspell ha
servido como una versión más popular del calendario del 13:20 y otorga a cada
individuo un KIN o Signo Solar con una Firma
Galáctica. (El mío, por ejemplo, es "Mago Galáctico
Blanco").
Cabe aclarar que algunos académicos mayas señalan que la
versión de Argüelles no refleja el calendario maya tradicional, sino que es una
creación del historiador, algo así como una "obra de arte".
El Dreamspell es un mapa relativamente nuevo que
fue creado alrededor de finales de los 80, tal vez con el fin de ayudarnos a
entablar una relación más armónica con el universo y algunos de sus
protagonistas: el tiempo, el espacio, y la conciencia.
Tomando en cuenta esta información, cada uno de nosotros
puede dedicir si celebrar o no este 25 de Julio como el “Año Nuevo Maya” o
como una fecha con alto valor simbólico y como un buen motivo para dedicarle
unos momentos de reflexión a nuestra vida.. a nuestros tiempos..los ciclos y
nuestra conexión con el Universo y con la Consciencia Universal.
El Día Fuera del Tiempo, tambien llamado Día Verde,
era considerado por los Mayas como un día especial para preparar al Alma,
crear un espacio para el juego, el arte, la magia y la creatividad.
Desde el año 1992 muchos seguidores del calendario se reúnen
en diferentes lugares del planeta para celebrar este día tan especial con
un Festival de Paz promoviendo la cultura, celebrando conectados con
la Tierra, danzando, cantando y jugando el Arte del Encantamiento del Sueño.
Este es un buen momento para dejar de lado las rutinas
diarias y dedicarse a crear, dejar volar la imaginación, conectar con un
propósito elevado que se guarda en el corazón...asumiendo nuestros temas
pendientes y reconociendo nuestros verdaderos objetivos.
Son momentos de sentir la energía que nos rodea, el Amor, la
contención y la Paz que hay en nosotros mismos.. para reflejarla en el
entorno...para celebrar el fin de un ciclo y el inicio de otro dentro de la
conciencia del AQUÍ y el AHORA.
